Pastel de levadura con ruibarbo, mermelada de fresa y manzana, cobertura de migas.

Si estás pensando en qué postre preparar para una visita a tomar café, prueba a hacer un bizcocho de masa madre con fresas y ruibarbo, espolvoreado con crujiente…
Ingredientes, es decir, lo que necesitas
350 g de harina de media fuerza
20 g de levadura fresca
250 ml de leche tibia
70 g de azúcar molido
70 g de mantequilla ablandada
2 yemas de huevo
2 pizcas de sal
500 g de ruibarbo
fresas (o albaricoques, ciruelas)
ralladura de limón
Desmenuzado
150 g de harina gruesa
100 g de azúcar cristal
100 g de mantequilla
Pasos de la receta
Mezcla la levadura fresca con el azúcar. Luego añade la mitad de la leche medida y un poco de harina. Mezcla suavemente y deja fermentar.
Bate las yemas con un poco de leche. Mezcla la harina con la sal.
Mezcla el fermento preparado con las yemas y añádelo a la harina. Mezcla y vierte gradualmente la leche tibia restante. Al final, añade la mantequilla.
Amasa la masa a fondo hasta que no se pegue a la cuchara y adquiera una consistencia suave. Luego cúbrela y déjala fermentar en un lugar cálido hasta que su volumen se duplique. Debe ser suave y no pegajosa en la superficie.
Lava bien el ruibarbo, quítale la piel y córtalo en trozos pequeños.
Cubre la bandeja con papel de hornear y precalienta el horno a 180 °C.
Para la cobertura, mezcla la harina y el azúcar, añade la mantequilla derretida y mezcla bien hasta que se forme una migaja.
Aplana la masa con el puño sobre toda la bandeja, cubre con el ruibarbo, espolvorea con azúcar y añade fruta u otro relleno, y al final espolvorea con la migaja.
Coloca la bandeja en el horno precalentado y hornea durante unos 15 minutos, hasta que los bordes empiecen a dorarse.
Información adicional sobre la receta Pastel de levadura con ruibarbo, mermelada de fresa y manzana, cobertura de migas.
La tarta de ruibarbo es un delicioso postre que combina sabores dulces y ácidos. La combinación con mermelada de fresa y manzana aporta jugosidad y una rica paleta de sabores a la tarta. La suave masa de levadura se complementa perfectamente con el crujiente crumble, que añade textura y sabor a la tarta. Este postre es ideal para una merienda por la tarde o como un dulce refrigerio para las visitas. El aroma de la tarta se extiende por toda la casa y atrae a todos a disfrutar de esta delicia con tonos veraniegos.