Knödel de tocino

Los dumplings generalmente sirven como guarnición, pero también pueden representar un plato principal. Esto es cierto, por ejemplo, para los dumplings de tocino, que preparamos con cerdo cocido.
Ingredientes, es decir, lo que necesitas
200 g de panceta ahumada
400 g de barras de pan viejas (mejor del día anterior)
150 g de harina gruesa
sal
pimienta molida
2 huevos pequeños
1 pizca de nuez moscada
unas ramitas de perejil (o 1/2 cucharadita de seco)
300 ml de leche
Pasos de la receta
Cocemos la panceta en una olla a presión hasta que esté tierna.
Retiramos posibles huesos y cortamos la carne en pequeños cubos.
Cortamos el pan en cubos pequeños. Lo mezclamos con la carne, lo ponemos en una fuente para hornear y lo horneamos en el horno, revolviendo de vez en cuando, hasta que esté dorado.
En un bol echamos la harina, la salamos, añadimos pimienta y nuez moscada, luego agregamos el perejil picado finamente y los huevos batidos con leche.
Mezclamos bien la mezcla, luego añadimos el pan tostado con panceta y todo lo unimos bien para formar una masa espesa.
Con una cuchara cortamos porciones más grandes, las moldeamos en forma redonda a mano y las ponemos en agua hirviendo con sal. Las cocemos durante 12 a 15 minutos según el tamaño.
Sacamos los dumplings cocidos con un cucharón agujereado, los cortamos y los untamos con manteca o tocino frito, luego los servimos con chucrut y cebolla frita en anillos.
Información adicional sobre la receta Knödel de tocino
Los knedlíky de tocino son un plato tradicional checo que se caracteriza por su sabor y su fácil preparación. Se elaboran a partir de masa de patata o masa levada, a la que se le añaden dados de panceta, a menudo enriquecidos con cebolla y especias. Estos knedlíky se suelen servir como guarnición para platos de carne, especialmente con salsas y carnes guisadas. Gracias a su contundencia y excelente sabor, se han convertido en un alimento popular en los hogares checos.